Siempre habrá un lugar para soñar
Hoy aprovechando el día nublado he estado paseando y disfrutado de la magia de Mare, he caminado por la playa de La Peña, sintiendo el mar sobre mis pies, que me transmitió su fuerza.
Después me senté en una de las terrazas de Mare y me tomé un ribeiro, esperando que viniera la mujer de mis sueños.
Cuando terminé he subido hasta el hotel “Mi Lugar”, donde me alojaré este verano y acabé comiendo en el mejor restaurante de comida francesa que se pueda encontrar “Mon petit rêve”.
Que más se puede pedir que disfrutar de un día tan maravilloso como este.
Si alguno de vosotros habéis comprendido esas palabras, os revelaré una noticia: esta tarde he dado los últimos retoques antes de ir a la imprenta de otra historia titulada “Siempre habrá un lugar para soñar”, que quizás hacia el mes de abril pueda llegar hasta vuestro corazón.
Si deseáis más información os animo a comunicaros conmigo en este correo:
siemprehabraunlugarparasonar@yahoo.es